La transición educativa de preescolar a primaria es un paso importante dentro de la vida de todo niño y su familia. En este período de cambios, es crucial el rol de los padres y maestros para crear una adaptación adecuada y respetuosa en esta nueva etapa escolar. 

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Como padres hay algunas alternativas que se pueden hacer para que la transición de los niños sea en un entorno agradable, explicarles que van a cambiar algunas cosas a las que se encuentran acostumbrados, como: el horario, las rutinas, los compañeros, el ambiente y los profesores. 

Es importante determinar que surgirán cambios propios del crecimiento tanto físicos, cognitivos y sociales que marcarán la adquisición de competencias y determinarán la forma de aprender a relacionarse y comunicarse, a solucionar  problemas y consolidar su autonomía.  

El trabajo en equipo entre colegio y familia es vital, en el caso de Los Pinos, las tutoras tienen un rol fundamental, pues son quienes realizan el seguimiento constante de cada alumna y se entrevistan periódicamente con los padres para buscar de modo conjunto el bienestar de las niñas  a fin de ayudarlas a enfrentar y resolver problemas propios de su edad y así puedan alcanzar el máximo desarrollo de sus capacidades.

Los cambios a los que se enfrentan los pequeños son prioridad para el trabajo cotidiano con los niños en nuestro Preescolar. Nos enfocamos en  destrezas de pensamiento y hábitos de la mente, así como en la identificación y manejo de emociones junto al desarrollo de habilidades sociales y trabajo colaborativo. Nuestros pequeños desde que ingresan a nuestras aulas aprenden a llevar una rutina en la que el orden, el respeto y la comunicación asertiva son el eje central de la convivencia beneficiando el proceso de transición a la primaria.

Aquí les compartimos 4 claves para llevar a cabo una correcta transición desde el preescolar hacia la educación primaria:  

 

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1.- Preparación: 

Antes de iniciar las clases, deben dialogar con sus hijos e irlos preparando desde casa con los hábitos básicos como son la hora del sueño y el horario de las comidas. Pueden hacerlos partícipes del proceso de preparación para el nuevo año escolar, permitiendo que ayuden a preparar sus útiles escolares, lonchera, uniforme, entre otros, para que se sientan involucrados desde el principio. 

Enfóquense en lo mucho que han crecido y que sientan que son niños grandes fomentando siempre la autonomía, una actividad esencial en estas edades es a través del juego. Por ejemplo, podrían realizar juegos de roles, un juego que permite identificar emociones y poner en práctica la empatía.  Es importante y útil asignar encargos y responsabilidades en casa, así los niños aprenden a ponerse al servicio de los otros y conocen sus necesidades. 

 2.- Seguridad y confianza: 

El primer día es crucial, puede llegar a ser un gran desafío, la principal recomendación es evitar desaparecer sin más, explicarles sobre la situación con anticipación. Despedirse, aunque sin alargar el momento. Con el fin de transmitir la seguridad y confianza de haberlos dejado en excelentes manos con un equipo altamente capacitado.

Los niños desarrollan confianza y seguridad por sus propios logros, esto lo van adquiriendo a medida que aprenden y completan nuevas tareas y metas. Por tal motivo desde temprana edad (Maternal) en el Preescolar Los Pinos Intisana los niños gustan de la imitación de acciones de adultos y compañeros de juego, siendo así su primera habilidad social, también aprenden sobre reglas y límites. La interacción y comunicación les ofrece seguridad, la misma incrementa su autoestima y confianza en sus habilidades y descubre una gran variedad de emociones. 

Hay que estar preparados para los posibles enfados, llantos o tristezas de los primeros días. El autor Will Glennon, define que “la educación emocional como ese proceso en que el menor aprende a identificar sus emociones y utilizarlas a su favor. A diferencia de los adultos, los niños poseen una mayor plasticidad cerebral, por lo que su capacidad de recepción de conocimientos no solo es mayor, sino de mejor permanencia, ya que están en una etapa donde todo aquello que aprenden es mucho más significativo en sus vidas, lo que puede repercutir tanto en el desarrollo cognitivo como afectivo y social”.

Es importante que al regresar de la escuela, conversen con los niños sobre cómo les fue en su  día y luego realicen preguntas en tono positivo, así lograrán saber cómo se sienten y les enseñarán a compartir lo vivido. Esto también los incentivará a tener una actitud adecuada en sus primeros días de adaptación.  

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3.- Adaptación y acompañamiento personalizado: 

Es crucial mantener una comunicación continua y fluida con la profesora y su tutora a fin de conocer cómo ha sido la dinámica dentro del aula y la adaptación a las rutinas. 

En Los Pinos la comunicación con los padres es primordial, ya que son los primeros responsables y protagonistas de la educación de sus hijos. Nos preocupamos permanentemente de proporcionar espacios de formación e información para nuestras familias. 

Es así que se desarrolla el Proyecto F un programa de orientación familiar creado especialmente para las familias de nuestro Preescolar, se compone de ocho sesiones que se dictan a lo largo del año lectivo, mediante metodologías teórico-prácticas que permitan a los padres de familia conocer los procesos propios del desarrollo que le atañe a cada etapa de los niños, desde una visión integral, física, cognoscitiva y emocional. Mediante este proyecto será más fácil para los padres  comprender cómo se desarrollará la fase de adaptación, y el tiempo lo determinará cada niño.

Si se presenta alguna dificultad, acuerden en conjunto medidas o estrategias que faciliten este proceso y no duden en acudir a la preceptora, quien les brindará un soporte profesional para desarrollar con eficacia esta labor, la tutora dispone de tiempo y formación específica, pero también cuenta con el compromiso de la familia. El diálogo permanente y sincero caracteriza la relación comunicativa entre padres, profesora y alumna. Por esta razón, la tutora está presente en las juntas académicas y realiza un acompañamiento a las profesoras en los despachos con los padres de familia, manteniendo una estrecha colaboración entre la familia y el colegio.

4.- Qué cambios experimentará: 

El paso a primaria es un gran reto para cada niño, los niños van haciéndose más autónomos, crecen en sus habilidades blandas como son la adaptabilidad, colaboración y resolución de conflictos, entre otras. Durante el preescolar los pequeños adquieren conocimientos básicos que los potencian en el futuro. A partir de estos conocimientos en la primaria desarrollan el pensamiento lógico, las matemáticas, habilidades lingüísticas y más. 

Con el pasar del tiempo identificarán que dan grandes pasos y adquieren mayores habilidades en diferentes áreas como son: expresión oral, tanto en español como en inglés. Crearán y desarrollarán hábitos de estudio que les permitirá descubrir y aprender varios contenidos que aportarán para el resto de su formación. 

A partir de segundo año de educación general básica (primer año de primaria), los niños y niñas pasan a los colegios respectivos para chicos y chicas, bajo el exitoso modelo internacional de Educación Diferenciada. Encuentran un lugar donde pueden ser autónomos y muy felices, con un equipo multidisciplinario, altamente capacitado, pensando siempre en su formación humana, espiritual y académica.

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