Mujeres que cambian el mundo: Dominique Carrera
Hoy nos trasladamos hasta Corea del Sur, país que acoge a Dominique Carrera, alumni graduada en el 2019. De esa época, no muy lejana, tiene hermosos recuerdos con sus compañeras, con quienes fortaleció lazos de amistad para toda la vida. Además, ha llevado consigo una de las primeras lecciones que aprendió en el Colegio, cuando, en clase de una de sus profesoras, escuchó decir “el borrador es nuestro mejor amigo”; frase que le ha acompañado, especialmente, cuando tiene miedo a intentar algo nuevo. Desde ese momento tiene claro que siempre hay nuevas oportunidades cuando lo que haces, lo haces con amor.
“He aprendido que los planes pueden cambiar, pero siempre hay opción cuando uno quiere verdaderamente algo”.
Apenas se graduó, empezó sus estudios de música en la Universidad de los Hemisferios; sin embargo, siempre tuvo claro que su sueño estaba en otro país y que su pasión por este arte la llevarían a alcanzarlo. Fue así que llegó a Seúl, donde se encuentra estudiando y perfeccionando el idioma coreano en la Universidad Chung Ang para, luego, comenzar sus estudios de Applied Music en el mismo país. Es cantante y amante de la producción musical, así que, estamos seguras que su talento y esfuerzo le llevarán muy lejos.
Uno de los retos más desafiantes que ha enfrentando es, justamente, aprender este nuevo idioma; no obstante, tiene claro que la exigencia en el aprendizaje de inglés y francés que recibió en el Colegio, le ayudó a relacionarse de manera más sencilla con esta nueva lengua y, como consecuencia, con esta nueva cultura.
Dominique considera que sigue en un proceso continuo de crecimiento personal y profesional, de conocerse y descubrir nuevas cosas en ella, que le permitan convertirse en la mujer que desea ser. En este camino, afirma, nuestro Colegio privado en Quito, Los Pinos, le ha ayudado a descubrir sus destrezas, habilidades y talentos, desde saber cómo hacer un gran ensayo, hasta impulsarle a realizar todo con un amor auténtico y real.
“Sé que al final, voy a ver un resultado si trabajo con cariño y esfuerzo por ello, no importa cuanto cueste o después de cuantos intentos lo logre”.
Desde su lugar actual deja huella en cada paso que da, pues cambiar el mundo también es llevar un poco de nosotros y de nuestra cultura a otras partes donde muy poco la conocen. Enriquecerse de otros y enriquecer a otros nos hace empáticos y, por ende, mejores seres humanos, más respetuosos, tolerantes y amables. Así que sí, Domi está liderando un cambio en un mundo que necesita más amor, conexión y cercanía.
¡Mujeres que cambian el mundo!